1. El nuevo auto de mi madre es más pequeño que el anterior que tenía ella, sin embargo es más ancho en sus detalles, por ejemplo sus espejos son en gran angular. No me acostumbro a esos espejos. Últimamente, cuando utilizo dicho auto y coloco la reversa, siempre termino parqueado a lo mafioso (auto ocupando dos espacios de parqueadero). Hoy, en la madrugada, parquee a lo mafioso en aquél hospital, no me importó; fue todo un logro después de quince minutos de intentos fallidos por intentar hacerlo bien.
2. Nos dicen que nos equivocamos de sala de espera, que vayamos a esa que es a la derecha, allá abajo, que luego tomemos el ascensor de la izquierda, que por ahí es que reciben a los que van para el quirófano. Nos dicen que también nos equivocamos, que vayamos a esa que es a la izquierda, allá abajo, que luego tomemos el ascensor de la derecha… andamos todo el hospital, es un laberinto. Llegamos retrasados al quirófano y tenemos los pelos de punta, de repente:
- Ustedes llegaron muy temprano, la operación es a las 9:00 am.- nos dice una de las enfermeras.
- Oh, y son las 6:30 de la mañana, que madrugón nos pegamos.- Nos decimos nosotros.
3. Los que vinimos de acompañantes, mientras empieza la operación, nos vamos a desayunar. Alguien sugiere que vayamos a un desayunadero muy barato al frente de Oviedo que él conoce, pero que lo hagamos caminando. Llevamos caminando una hora y nada del desayunadero.
- ¿Y dónde Mier… queda el desayunadero? con esta hora de camino estamos haciendo el ejercicio de la semana.
- Ya vamos a llegar.
- No vamos a alcanzar la operación.
- Todavía tenemos tiempo, falta una hora para que empiece.
Llegamos al desayunadero, es una chaza al lado de la avenida de El poblado, donde comen los taxistas. No venden el desayuno del que estamos antojados, al menos no algunos de nosotros.
- Nos hiciste caminar una hora y más para comer aquí, para esa gracia hubiéramos desayunado en el hospital.
Cuarenta minutos después entramos en el primer chuzo que vemos devuelta al hospital, desayunamos a la carrera, nos cae como patada en el estomago el desayuno.
4. Tenemos a una infiltrada en el quirófano, una prima que es instrumentista (de las que ves en las películas y series de doctores, de esas que le pasan cuanto objeto extraño pida el cirujano). La infiltrada sale por quinta vez del quirófano, nos dice:
- Va todo bien, ya solo falta media hora de la operación.
Sus palabras son un alivio después de una hora y media en la que, sentados en la sala de espera, ya nos hemos visto unas animaciones cutres del Oso Yogui y una película sobre un perro que es un capo del fútbol y que juega en un equipo de humanos - ¿a quién mierda se le ocurrió escribir ese guión, dirigir y financiar esa película? ¿Un perro que juega fútbol, se los saca a todos y que mete goles con las patas delanteras, de cabeza, de chilena… ah?-.
5. Ya la operación ha terminado, todo salió de pelos, estamos en la sala de espera de los que están en recuperación. Son las 3:00 pm, estamos esperando el almuerzo que nos han mandado de la casa de mi abuela, estamos pasados del hambre, hoy nos ha ido mal con la comida. Conversamos allá y aquí, damos vueltas por el hospital, tomamos café…
*- A una compañera del trabajo en estos días le dieron 20 años de cárcel por abuso sexual con un menor de 14 años.
- Pero ¿fue violación o con consentimiento del niño?
- Con cualquiera de los dos se la llevó el hijueputa. Según la ley no puedes tener relaciones sexuales con nadie menor de 14 años.
- ¿Cómo así, si se puede con alguien de 15, 16, 17, 18? Todavía son menores de edad ¿no?
- Según la ley colombiana, si ellos dan el consentimiento sí se puede. Si es abuso, pues el que lo haga se lo llevó el hp.
*- Todavía estoy pensando en ese perro futbolista de la película, ¿Un perro que juega fútbol, se los saca a todos y que mete goles con las patas delanteras, de cabeza, de chilena… ah?
*- Te puedes encontrar con el cirujano más pirobo, hasta con el cirujano más buena gente. Algunos de ellos, cuando se están volviendo muy tesos son lo peor. Otros por más tesos que sean sí son buena gente.
- Los cirujanos se creen Dios, lo vi en una película. Pero así es la gente, no sólo son los cirujanos, el que es un cretino es un cretino así tenga talento o no lo tenga, así sea pobre o rico.
*-¿Y el gorrito multicolor que tienes en la cabeza, cubriéndote el pelo, es el de “esta cirugía es una fiesta se muera o no el paciente”?
- No es un gorrito de fiesta, bobo, pero he tenido gorritos bonitos.
*-Nos acabamos de tomar un jugo de mandarina que valió 3.000 pesos y era chiquito y estaba maluco.
*- ¡¿Qué?! ¡¿Se fueron en gallada a ver esa nueva película de Crepúsculo?! Que manada de casposos
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