1. Sé que para ti ya no soy popular, ante ti me construí lentamente una mala reputación: soy el tipo que habla y habla y habla sin parar, nunca pasa a la acción y en el momento menos esperado está decaído, mirando el pavimento, sopesando la situación.
2. Contigo perdí la oportunidad hace mucho tiempo, lo sé. No lo diría si no llevara años conociéndote; conmigo concedes silencios extendidos que sólo se rompen cuando algún amigo, tuyo o mío, se hace el héroe y nos salva de una muerte espantosa por agotamiento al tedio. Dulce tedio para mí, aunque, tú sabes, lo dulce se vence, se pone agrio.
3. Eres esa clásica persona que todo lo resuelve con un chasquear de dedos: cuando estuvimos tan cerca, que nuestras narices se rozaron, que casi pude besarte y en el camino me arrepentí, mirando hacia otro lado, y me puse hablar de cómo la noche estaba tan fría; tú pasaste a otra cosa: te calentaste los brazos con las manos, te pusiste tu chaqueta, te fuiste con tus amigas a un McDonald´s, y todo a pesar que conmigo ibas a ir a un restaurante italiano, donde la comida siempre es caliente.
4. Cinco años desaparecí, no te olvidé. Tú lo sabes, o quiero creer que lo sabes: no me fui a un país extranjero u a otra ciudad, ni me encerré en mi casa a solo beber agua, ni me fui a tomar súplicas en un monasterio budista, ni nada de esas vainas, tampoco me apretujé con indigentes debajo de un puente, no. Desaparecí entre las sombras, desde donde siempre te veo bailar en esas fiestas locales, y veo que eternamente haces ese paso de baile en el que estiras una mano, levantas una pierna y tienes un ojo cerrado porque en tu boca siempre hay un cigarrillo encendido; y con el otro ojo, que tienes abierto, me miras; eso quiero creer. Eres popular, y me observas tratando de descifrar que entre ese anonimato que brinda una buena sombra hay alguien que… bueno, soy yo.
5. Desde que no te hablo más has tenido cinco novios –incluyendo esa recaída de tres veces con el que fue tu segundo novio-. Ante ti me construí lentamente una mala reputación: Me rompo el corazón yo solito, así somos los cobardes. Te quisiera dedicar una canción, pero no se me ocurre ninguna, sin embargo, sé, cuando te vuelva a ver, toda una buena banda sonora explotará, tan buena es que quedaré endeudado por pagar los derechos de dichas canciones.
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4 comentarios:
Ahhhhhhhhhhh bonito post! Ole a todas esas te aliviaste un poco? Querés caer a la casa hoy y nos tomamos unos cuántos... (valga aclarar que no encuentro tu tel)
listo, ya mejore, voy para allá
parce este post me pareció una chimba, de veras me tocó el corazón!
Byron...
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