No por pereza - o bueno sí, en parte-, he ido tazando mi lectura de libros – últimamente no encuentro nada que me enganche totalmente, y no es por falta de buenos libros, no sé, mi vida…-, y esta mañana de nuevo retomé 31 canciones, de Nick Hornby. Leí la canción 24, “Late for the sky”, de Jackson Browne. No tanto la canción de Jackson Browne como sí la canción, o la lectura del capítulo, me gustó bastante, y bueno, por eso este top 5.
“A ninguno de mis amigos les gustan The Strokes tanto como a mí (aunque he de admitir que es porque piensan que ya lo han oído todo antes, mientras que a mí me gusta eso de haberlo oído todo antes, así que puede que ésta no sea la prueba incontrovertible de la eterna juventud del rock duro que ando buscando); unas recientes actuaciones en vivo de Marah, cuyo volumen hizo que mi amigo Lee se acordase del Ted Nugent más aterrador, me hicieron comprender que, sencillamente, tengo que dejar que me zumben los oídos más a menudo.”
1. En lo que consta de mí, soy arrítmico completamente. Siempre en la letra de una canción, si la repito, voy adelante o atrás del cantante, nunca caso por más que lo intente; sin embargo cómo me gusta cantar esas canciones que me gustan.
2. Si bailo es lo mismo, no hay caso que me enseñes a bailar, ya muchos/as han fracasado en el intento. Pero siempre me veras “bailar” si estoy de ánimos para hacerlo.
3. Escuchar música con los amigos está bien, sí, pero siempre está la disputa de quién es el DJ, y pues no soy uno de los preferidos para hacer ese trabajo. Hay algo muy molesto de mí, y lo sé muy bien, créemelo: soy capaz de repetir hasta cincuenta mil veces seguidas, una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez, una misma canción que me gusta mucho. Por eso es que con buenos ojos veo el hecho de escuchar música en solitario, encerrarme en mi pieza, atiborrarme de un mismo ritmo una y otra vez; no quiero que vengas tú a tratar de pasar la canción, o a que le bajes el volumen para poder hablar.
4. Mi inglés no es muy bueno que digamos, más malo que bueno si soy sincero, y muchas de mis canciones favoritas de todos los tiempos que se han vuelto en favoritas al instante son en inglés avanzando para mí. Si ves en eso un problema, pues para mí no lo es. Por más que no entienda qué carajos está cantando el tipo o la tipa en la primera vez que oigo dicha canción, si el ritmo, la melodía, la voz, el tono del cantante o la cantante me enamoran entristeciéndome o alegrando, me importa un carajo que estén hablando de amor cursi desabrido o cualquier otra vaina que tenga que ver con matar una araña o algo por el estilo, es música; en ese caso la voz es otro instrumento más, algo como una buena guitarra o un bajo o una batería... Después de escuchar esas canciones un par de veces me entero de qué van, y aún así algunas no han dejado de ser favoritas.
5. No sé tocar ningún instrumento, no sé leer partituras ni nada por el estilo, no sé cantar ni tengo buena voz para hacerlo, no tengo un gusto definido por un genero de ella, como para decir “mira, sólo me gusta la música celta, ¿nos parchamos tú y yo?”, te escucho desde vallenatos al punk más podrido. Sólo sé que la música es algo importante en mi vida, y sin ella no sé qué haría.
El nuevo videoclip que les hice a mi banda amada Neoplatonics, espero les
guste.
-
El nuevo videoclip que les hice a mi banda amada Neoplatonics, espero les
guste.
Hace 5 días.
4 comentarios:
ve, Byron, en un ratico libre que tengas oye un grupo español llamado Señor Mostaza, me da mucha curiosidad saber qué te parece
Diego, me gustó el grupo home :)
jejeje, digamos que lo intuía... ése es de los que yo escucho compulsivamente y me aprendo las letras y eso
seems good!
Publicar un comentario