5. – Tonces qué parceros ¿todo es bien?
- Sisas mi niño, todo bien.
- Bien, bien. Parce, le necesitamos decir una cosa.
- Hágale.
- Pero no aquí llave, usted sabe como es la vuelta.
- Sisas ¿a dónde vamos?
- A la cancha del Corazón, vamos en la moto.
- Listo, para las qué sea, ustedes saben que yo soy todo terreno. Espérenme le digo a mi polla que ya vengo.
- ¿Cuál es tu polla parcero si se puede saber?
- La pelinegra que está recostada contra la pared.
- Uyy, parce, está mera chimba esa pelada. ¿Cómo se llama?
- Sara.
- Uyy tiene hasta nombre bonito. Llave, lo malo es que yo no toco las pollas de los parceros, porque o sino otro gallo cantaría. Que chimba de vieja, uuf.
En la cancha del Corazón mientras se bajan los tres de la moto y empiezan a caminar hacia uno de los arcos:
- Ahora sí, cuéntenme la vuelta parceros.
- Parce, el caso es por ahí andan diciendo que usted se nos faltonéo.
- Oiga a éste man ¿cómo así, quien anda diciendo esas chimbadas? Yo soy legal.
- Legal mis güevas maricón.
- Legal esta que te va a matar catrechimba.
Pumm, pumm, pumm, tres tiros en la parte de atrás de la cabeza y el chico cae al piso, o mejor dicho, en la arena de una chancha de barrio. Luego se riega la noticia por todo el corazón y luego por Belencito “¡Mataron a T*****!. “¿Quiénes?”. “¿Pues quienes van a ser? Los milicianos”. “¿Pero si él era miliciano?”. “Ah yo no sé, pero lo mataron”. “¿Y ya lo sabe Sara?”. “Sisas, ya la llevaron a verlo, todavía no le han hecho el levantamiento, todavía está tirado allá en la cancha del Corazón”.
La momia, Adrián, David y yo fuimos al funeral del chico miliciano, en el cementerio de San Javier, sólo por ver a su novia Sara; nuestro amor platónico en conjunto. La momia se babeaba por ella.
4. – Que caja, jajajajaja, que tiradera de risa con La momia.
- ¿Qué pasó pues?
- El güevón se le declaró a Sara y ella lo mandó por un volado.
-Ah, pero eso se sabía, La momia si es güevón, si a la pelada le acabaron de matar al novio.
- Jajajajaja, así es La momia.
- Pues sí, así es La momia, tiene el sentido común en el culo.
3. – Qué más pues Libia, bien o no.
– Byrolo, estás gordo.
- Sí Libia, lo sé, yo me miro en el espejo, además todo mundo me lo dice, no dejan de resaltar lo obvio ¿por qué será?
- Byrolo ¿si sabías que mataron a Alexis?
- Por qué será que no me extraña la noticia. Lo mataron por bobo. Mucho se le dijo que dejara esas bobadas de querer ser miliciano. ¿Dónde lo mataron?
- Por Villa Laura, dicen que lo mataron los mismos milicianos.
- Nada nuevo entonces.
- Ah, sabes también a quién mataron, al hermano de Duvan.
- ¿Cual?
- El del medio, el que era miliciano.
- ¿En serio? No sabía que se había vuelto miliciano.
- Sí, pero a él si lo mataron los paracos. Es que mientras usted estaba en Argentina por aquí han pasado muchas cosas.
- Eso veo. Libia, seguime contando chismes.
- Si sabías que Jorge Iván ya tiene una niña.
- ¡¿En serio?! ¡¿La momia tiene una hija?!
2. – El alcohol y el cigarrillo te matan.
- ¡¿En serio?! No te lo puedo creer ¡¿Cómo lo supiste?!
1. ¡ Todos los ahorcados mueren empalmados.!
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1 comentario:
Apoyo incondicional al momia!
saludos!
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