jueves, diciembre 20, 2007

TOP 5 Yendo al doctor

5. Media hora esperando turno para que me atiendan en una ventanilla y me den la orden para pasar a ver el Doctor. Hasta que por fin.

- Buenas, vengo a una consulta medica.
- Entrégueme la cedula.
- Bien.
- ¿Su Ips es Coomeva?
- Sí, pago cada mes.
- No me lo tiene que recordar.
- Ah, creí que me estaba preguntando.
- Bien don Byron, su cuota moderada es de 1.700 pesos.
- Eh, ¿tengo que pagar?
- Su cuota moderada sí.
- Ah, ¿eso no está incluido en lo que pago cada mes?
- No.
- Ah.
- Lo va a atender el doctor Perengano que está en la oficina 101. Cuando él lo llame le entrega este papel.
- Bueno, muchas gracias. Me gustó su sonrisa.
- ¿Cierto qué es bonita?
- Muy convencida.
- Ah, uno que se las da. Don Byron, que esté bien, que el medico no le diga que tiene una enfermedad terminal o algo así.
- Esperemos que no, no tengo como pagarla, morirse de eso sale muy caro.

Risas.

4. Media hora esperando a que el medico me llame.

Pensamiento: Ellos siempre lo hacen esperar a uno, pero llegue uno tarde a ver si lo atienden.

Una niña de unos tres años se me acerca y me mira fijamente a los ojos. Después de unos segundos estoy completamente nervioso. Esa niña, a mi parecer, es el demonio en persona.

- Niña, ¿no tiene otra cosa que hacer?

La niña niega con la cabeza.

- Señora, su niña está tratando de robarse mi billetera.

La mamá de la niña hace mala cara, reprende a la niña, la agarra de la mano y se la lleva para su lado. La niña desde lo lejos me sigue mirando.

Pensamiento: Doctor Perengano, ¿Cuándo me vas a atender? Esa niña de un momento a otro me va a hacer el internacional gesto de: “a la salida te agarro a piñas”. Por fin el Doctor me llama. Un alivio.

- Byron, cuénteme, ¿qué lo trae por aquí?
- Doctor, mmm, creo que tengo una enfermedad terminal y sin cura. Me estoy muriendo, doctor.
- Mmm, antes de ser tan fatalistas, cuénteme los síntomas.

Quince minutos después.

- Mmm, ya veo, ya veo. Párese en la báscula para saber cuánto pesa y cuánto mide… Mmm, tiene sobrepeso. Estamos como gorditos.
- ¡En serio doctor! ¿Estoy gordito?
- Concejo Byron, nunca sea sarcástico con su doctor.

Sonrisa del Doctor.

- Tiene razón, perdón.
- De nada. Ahora siéntese en la camilla que le voy a tomar la presión.

Diez minutos después.

- A ver, usted no tiene ni la enfermedad de Huntington, ni la enfermedad de parkinson, ni…

Pensamiento: Si esto fuera Dr. House o ER ya me estarían haciendo exámenes de quién sabe qué, y estaría rodeado de enfermeras bonitas. Maldita medicina de la vida real.

-… relájese, no tiene ninguna enfermedad terminal. Pero tampoco se relaje del todo. Lo que sí me preocupa es que tiene la presión muy alta. Eso no es normal para alguien tan joven como usted.
- ¿Ah?
- Que tiene la presión alta.
- ¿En eso influye el café?
- Sí, un poquito.
- ¿En eso influye que yo esté nervioso?
- Si, un poquito.
- ¿En eso influye que me vine caminando desde la casa?
- Sí, todo influye un poquito. Hasta influye el licor que usted se toma.
- ¿Cómo lo supo?
- En su historia médica lo dice. Le voy a mandar un Ionograma.
- ¿Qué es eso doctor?
- El nivel en la sangre de Cloro, Sodio, Potasio y Bicarbo.
- Ah, ¿Esas cosas las tenemos en la sangre?
- Sí. Además, por tres días se tiene que tomar la presión antes de fumarse un cigarrillo, comer o beber algo. Si en ese examen sigue con la presión alta pida que lo coloquen en el grupo de hipertensos.

3. Salgo del consultorio medico. Empiezo a caminar con las manos en los bolsillos, miro el pavimento.

Pensamiento: ¿Presión alta?... ¿Cuándo además de hoy tuve la presión alta?... siempre resulté invicto en la presión. Ni muy alta, ni muy baja… Es el cigarrillo… Sí, es el cigarrillo… maldito cigarrillo. Voy a dejar de fumar.

Basurita en la calle para patear. Pateo la basurita.

2. Pensamiento: Voy a volver a ser como era antes de fumar: lleno de energía, lleno de amor por el mundo; Flaco, atlético, con los dientes blancos, sin arruguitas en los labios, con el dedo índice derecho del color de un dedo normal, no amarillo en la uña. Maldito cigarrillo, te voy a dejar, sólo me has traído una presión alta. Me voy a convertir en un tipo de esos que no fuman y que van repartiendo consejos de amor por el mundo por aquí y por allá: “No fumen, sean felices, Byron se los dice”. Me voy a convertir en uno de esos tipos que si les fuman al lado hacen un gestito de asquito con la mano: “fo fo fo, que asquito que me das, tienes mal aliento, hueles a cigarrillo, eso está tan pasado de moda como tu celular que no es a la vez ni I pop ni Inodoro”. Voy a ser el tipo más saludable del planeta tierra. Cigarrillo de los mil demonios, llevo cinco minutos sin desearte y ya me das asco, escupo sobre el pavimento con sólo pensar que alguna vez fui adicto a ti… Ya sé, voy a dibujar un cómic sobre esto: presión alta, dejar de fumar, tipa de la ventanilla bonita con una sonrisa bonita, el primer Doctor que me cayó bien en la vida real, no voy extrañar a los patos que te piden un plon de tu cigarrillo y luego te lo dejan babeado, yo saliendo de del consultorio medico pensando en todo esto pensando en dibujar un cómic sobre todo esto. Soy un genio desde que dejé de fumar, JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA.

Cruzando la Avenida Oriental veo a Truchafrita cruzando la calle yendo hacia el parque del periodista.

Pensamiento: Ya sé, le voy a decir a Trucha que voy a dibujar un cómic sobre lo que me pasó en el doctor… éste Truchafrita si camina rápido, imposible alcanzarlo con mi presión tan alta. Mmm, Truchafrita se está quedando calvo, tiene el pelo largo pero mirá cómo se le cae el pelo desde la parte de atrás. Trucha, no corras tanto. Trucha, también se te atrofió el oído, no escuchas que te estoy gritando.

1. Llego al parque del periodista y veo a Truchafrita con su Monita sentados en la tienda de don Rogelio – el bar de un tío de mi primo Enchuspín-. Me da pereza quedarme ahí porque pronto va a ser el partido de Nacional contra Equidad y me quiero ir para la casa rapido; Nacional tiene ese partido comprado hace rato y el festejo de esos va a ser grande. Así que no saludo ni a Trucha ni a la mona, y me vengo para mi casa a escribir este TOP 5. Aquí se me ocurre que el tipo que salió del doctor (yo) tal vez pudo tener una tentación: que por donde él caminara hubiera cigarrerías abiertas y al final el tipo estuvo tentado a fumarse el último cigarrillo de su vida.

Llevo cinco últimos cigarrillos de mi vida.

3 comentarios:

joni b dijo...

cuando mi iba a dar un paro cardiaco también me fumé mis diez últimos paquetes. Después resultó que no tenía nada, así que para celebrarlo he estado fumando el doble.

Dcasalins dijo...

-Hola, mi nombre es Diana y soy fumadora -responden sonrientes:Hola Diana- bueno, quería decirles que es obvio que lo que cada uno haga con su presión arterial y sus pulmones es su problema, lo único que a veces me da una punzadita en la conciencia es la idea de que al fumar soy como un mofle de carro contribuyendo a la polución y el calentamiento global... claro después descanso un poco porque yo no ando en carro sino a pie, entonces se compensa la cosa... digo, igual somos una especie de mierda y de una forma u otra vamos a joderlo todo...
-Gracias Diana -responden.
Voy al fondo del salón, me sirvo café y me fumo un cigarro.

Byron Alaff dijo...

Hola Diana - respondes como saludas-, como una frase que dice el personaje de Clive O (Teo) en Los niños del hombre:"El mundo se fue a la mierda hace rato".
Que buena tu visita por este blog, chaolines, enciendo un cigarrillo. - dices algo así: "chao, voy a seguir pasando por acá y voy a seguir dejando comentarios".

Joni, lo mismo estoy haciendo, al menos hasta el proximo año que me haga los examenes que me mandaron.

Y nada, feliz 24